Lo más certero sería identificar si es temporal o permanente. Si es temporal, podría estar asociado a un cuadro de resfrío, lo que quiere decir que una vez que el niño se mejore va a desaparecer esta respiración por boca y retornará la respiración normal por nariz.
Si por el contrario, el niño respira por boca la mayor parte del tiempo, es de suma importancia consultar con un médico Otorrinolaringólogo, que evaluará y podría identificar la causa. A veces los niños poseen amígdalas o adenoides de mayor tamaño que impiden el ingreso suficiente de aire, por lo que el niño tenderá a abrir la boca para respirar. Esta situación se acompaña generalmente de ronquidos nocturnos.
En el caso de los niños con problemas de lenguaje esta situación es aún más perjudicial, ya que el oído medio no se ventila adecuadamente, lo que produciría un descenso en la audición de hasta 40 db. Esta disminución de la audición interferirá en el tratamiento y superación de sus problemas lingüísticos.
La respiración bucal es un cuadro que trae importantes secuelas a nivel orgánico (paladar, columna, dientes), por lo resulta urgente consultar al médico especialista indicado.